El conde Roland von Faber-Castell con sus caballos
El conde Roland von Faber-Castell tenía una estrecha relación con los caballos desde una edad temprana. Su caballo favorito fue el semental Lipizzaner "Kanonier", un regalo de la directora de circo Trude Sarrassani, a la que ayudó salvar los animales del Dresde ocupado por los soviéticos en el período de la posguerra.